1 Corintios 7:7b. Pero cada uno tiene su propio don de Dios, uno a la verdad de un modo, y otro de otro.
Escrito Por:Dilvany Gámez de Moreno
Se ha preguntado ¿Cómo crecer en el servicio en el pueblo de Dios? El servicio en la congregación está ligado con el uso de los dones que Dios repartió a cada creyente. En este instante, puede que se pregunte ¿tengo dones?. Lea nuevamente el versículo de hoy “pero cada uno tiene su propio don de Dios”, la respuesta es que cada hijo de Dios tiene dones (si usted desea conocer qué dones tiene debe dedicar tiempo en oración, en comunión con el Espíritu Santo, estudiar los dones y por supuesto tener una vida activa en su congregación).
Ahora, tenemos otra interrogante ¿Qué estoy haciendo con los dones y talentos que Dios me dio?. Cuándo pongo en ejercicio mis dones, me ayuda a crecer espiritualmente y también contribuyo al crecimiento espiritual de mis hermanos; por ello, Dios en su sabiduría, nos otorgó dones a todos sus hijos de manera diferente para funcionar como el cuerpo que somos y de esta forma, crecemos en la gracia y nos multiplicamos en el servicio como el pueblo de Dios.
Amado lector, sabe qué es triste, estar consciente de los dones y que no los use como a Dios le agrada, para edificar a su iglesia; usted ¿desea crecer en el servicio al pueblo de Dios? Honre a Dios viviendo dignamente, haciendo uso de los dones que por gracia les fueron confiados ya que será inevitable que rindamos cuentas de ese regalo que Dios nos concedió.