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1 Juan 4:2 “En esto conoced el Espíritu de Dios: Todo espíritu que confiesa que Jesucristo ha venido en carne, es de Dios”.

Por: David Agustín Pérez Vera

La Palabra del Señor, en este día nos habla de la importancia de distinguir los espíritus, y nos da una pista muy clara sobre cómo hacerlo. En tal sentido el versículo es una guía para saber si un espíritu es de Dios o no. Si alguien afirma que Jesucristo ha venido en carne, entonces podemos estar seguros de que ese espíritu es de Dios. Si no lo afirma, entonces podemos tener dudas. Sin embargo, más allá de eso, este versículo también nos recuerda la importancia de mantener nuestra fe en Jesucristo como el centro de nuestras vidas. Si creemos en Jesucristo como Dios hecho hombre, entonces podemos estar seguros de que tenemos una relación con el Espíritu Santo de Dios.

Frente al contexto compartido encontramos un elemento fundamental de las Sagradas Escrituras, por cuanto, el Eterno Dios nos creó como seres espirituales tripartitos, cuerpo, alma y espíritu, siendo necesario tener presente, que existe el bien y el mal, y las Escrituras nos enseñan, que la paga del pecado es muerte espiritual, por lo tanto, toda persona que llega a este mundo, un día debe de reconocer su vida de pecado, arrepentirse y aceptar a Cristo como su Señor y Salvador, a fin de cobrar vida espiritual. 

Por lo cual, este es un pasaje muy importante de la Palabra, en donde se nos advierte del peligro existente de que alguien pierda el control y caiga en las profundidades del delirio, que lo llevan a consultar a través de adivinos, ocultistas y burladores, como en el tiempo de apóstol Juan, quien se enfrentó directamente con el gnosticismo, que fue una de las primeras herejías en ese contexto histórico.

Por eso hoy se enfatiza “En esto conoced el Espíritu de Dios”, lo que indica claramente que lo que sigue a continuación, es una clave para identificar el Espíritu de Dios. Y esa clave es que “todo espíritu que confiesa que Jesucristo ha venido en carne, es de Dios”. En el griego hay varios verbos que significan confesar, algunos significan confesar en un juicio bajo juramento, otros significan confesar con la boca de algo que hizo o vio, pero este verbo denota una confesión que va más allá de las palabras, es más bien un confesar con acciones. En este caso el apóstol Pablo usa este verbo en Romanos 10:9 “Que, si confesares con tu boca que Jesús es el Señor, y creyeres en tu corazón que Dios le levantó de los muertos, serás salvo”; es decir, hasta una persona que no habla puede ejecutar este verbo al vivir con transparencia en su testimonio cristiano. 

La base de nuestra relación con Dios es la creencia en Jesucristo como el Hijo de Dios que vino a salvarnos, rescatarnos y redimirnos eternamente, invitándonos en nuestro caminar diario a discernir cuándo un espíritu es de Dios, y cuándo no lo es. Amados hermanos y amigos, esta porción bíblica es una herramienta útil para todos los hijos de Dios que quieran profundizar en su relación con Él y estar seguros de estar en el camino correcto.

Juntos reconozcamos, que Cristo nos dio vida espiritual y que el Espíritu Santo ahora vive en nosotros y nos guía y ayuda a testificar con nuestras vidas que somos hijos del Eterno, haciendo siempre Su Voluntad perfecta, Shalom.

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