1 Juan 5:5 “¿Quién es el que vence al mundo, sino el que cree que Jesús es el Hijo de Dios?”.

Por: Dayse Villegas Zambrano 

Ahora, en estos cuatro últimos devocionales de enero, compartiremos cuatro profundas afirmaciones a las cuales debemos ser fieles como hijos de Dios. La primera, la que leemos hoy es: creemos que Jesús es el Hijo de Dios, que vino al mundo no solo como Dios, sino como un ser humano (1 Juan 5:6). Y que esto era necesario pues al ser humano, podía morir por los pecados de todo el mundo. 

No creemos que Jesús es un ángel ni un espíritu ni un profeta. Creemos que es el Cristo, el Salvador, Dios con nosotros, nuestro Emanuel, el principio y el fin de todas las cosas, el Señor de la creación. No creemos que fue un sabio maestro, sino que es nuestro Maestro, el que nos enseñó el camino al Padre al hacerse camino al Padre (Juan 14:6). 

Tampoco creemos que sea un rey terrenal o únicamente el rey de una nación, sino el rey de todo el universo. Por él y para él fueron creadas todas las cosas, y sin él, nada de lo que ha sido hecho, fue hecho (Juan 1:3).

No creemos que sea un iluminado. Creemos que él es la luz del mundo, y que todo el que le sigue, no andará en tinieblas, sino que tendrá la luz de la vida (Juan 8:12).