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1 Pedro 4:7 “Más el fin de todas las cosas se acerca; sed, pues, sobrios, y velad en oración”.

Escrito Por: Nelly Jácome de Pérez

Más el fin de todas las cosas se acerca: Detrás de esto se encuentra una verdad inescapable y sumamente personal, para cada uno de nosotros el tiempo está cerca. Lo único que podemos decir cada uno es que tenemos que morir para cada uno de nosotros, el Señor está cerca. No podemos decir el día ni la hora cuando iremos a encontrarnos con Él y por tanto toda la vida transcurre a la sombra de la eternidad.

La palabra «sobrio» quiere decir templado, moderado. EL apóstol Pedro usó con frecuencia esta expresión y realmente les quiso decir «por lo tanto, sed inteligentes, sed cristianos inteligentes». Un cristiano inteligente es aquel que conoce la Biblia; es decir, que la conoce lo mejor posible. Pero, un creyente inteligente y sobrio va a conocer todo lo que pueda sobre la Palabra de Dios.

El cristiano tendrá que ser también inteligente en este mal sistema de valores de este mundo. El Señor Jesús les dijo a Sus discípulos, en Mateo 10:16 “Sed, pues, prudentes como serpientes y sencillos como palomas”.

El tomar las cosas seriamente es darse cuenta de su verdadera importancia y el prestar atención a sus consecuencias en el tiempo y en la eternidad, es enfrentarse a la vida no como un juego, sino de un asunto serio del cual tendremos que dar cuenta.

Velad en oración, tiene que ver con que Debemos mantener viva nuestra necesidad de orar. Cuando una persona tiene la mente desequilibrada y su planteamiento de la vida es frívolo e irresponsable, no puede orar como debe. Aprendemos a orar solo cuando tomamos la vida tan sabiamente y tan en serio que empezamos a decir en todas las situaciones “Hágase tu voluntad”, la cual fue la expresión de Jesús en el huerto de Getsemaní.

La primera necesidad de la oración es el sincero deseo de descubrir la voluntad de Dios para nuestra Vida”. ¿Tiene usted una necesidad imperiosa de llevar sus imperfecciones a Dios y buscar su santa Voluntad? ¿Ha determinado usted en su vida cuánto tiempo es necesario para usted ir a la presencia de Dios a orar (cada tres horas, cada 6 horas, tres veces al día)? ¿Qué importancia asigna usted a su tiempo de oración con Dios?. Que pueda como hijo de Dios, ser sobrio y velar en oración, Cristo Viene pronto.

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