1 Timoteo 3:15  “Para que si tardo, sepas cómo debes conducirte en la casa de Dios, que es la iglesia del Dios viviente, columna y baluarte de la verdad”. 

Escrito Por: Walter Encalada Pazmiño 

Este mes juntos compartiremos parte de la eclesiología biblica que es la Iglesia del Dios Viviente columna y baluarte de la verdad. Encontraremos las bases biblicas para afirmar esta verdad, la IGLESIA, la unica iglesia de Jesucristo, los nacidos de nuevo han sido incorporados al cuerpo de Cristo, de propiedad divina, verdad expuesta cuando el señor Jesús responde al apóstol Pedro y dice: “y sobre esta roca edificaré mi Iglesia” Mateo 16:18, su palabra escrita siempre será preservada para nuestra enseñanza, en ella encontraremos lo que Dios demanda de nosotros como hijos suyos, como miembros de su cuerpo, nos enseña como debemos  comportarnos en su casa y fuera de ella,  con nuestros hermanos y semejantes, con las autoridades de la iglesia, es nuestro modelo a seguir para lograr una iglesia unida en el amor de Dios, obediente a sus principios, a su mandato de proclamar su evangelio a toda criatura. 

Para el inicio del presente devocional nuestro objetivo común es enfocarnos a su lectura diaria de su palabra, muy importante y necesario no solo para nuestro conocimiento espiritual, sino para ponerla en práctica en nuestro diario vivir en el mundo que nos rodea, sin importar el tiempo que ella demande cada día y sobre todo pidiendo a su Espíritu Santo nos guie cada día a un estudio mas  profundo de su palabra, haciendo de esta enseñanza un cambio en cada uno de nosotros, los salvos en Cristo. 

Su palabra va a mantener unida a la Iglesia a pesar de los problemas propios de cada congregación haciendo que nuestra medurez espiritual descanse solidamente en las promesas de nuestro Padre Celestial.”Que andenos dignos de la vocación con que fuimos llamados, con humildad y mansedunbre, soportandonos con paciencia los unos a unos a los otros en amor” Efesios 3:2.  Nuestra oración siempre será por una iglesia tenazmente unida en el Señor, al comenzar este devocional pidamos juntos en oración por una Iglesia unida, en su amor, en su conocimiento,  esperando juntos su regreso.