Juan 16:33 “Estas cosas os he hablado para que en mí tengáis paz. En el mundo tendréis aflicción; pero confiad, yo he vencido al mundo”.

Por: Ps. David Pérez Vera

En la actualidad, quien no vive de frente a las tensiones, provocadas por un mundo globalizado, considerando, aspectos que inciden en la vida espiritual, familiar, profesional y hasta laboral.

Nuestro Señor Jesús como Dios, sabía el tipo de vida que la humanidad debía enfrentar a través de los siglos, todo tipo de aflicción, por ello, en una noche Jesús con palabras llenas amor y esperanza les dijo a sus discípulos que cobrasen ánimo. A pesar de las luchas inevitables que deberían enfrentar, no estarían solos. Jesús tampoco nos abandona en nuestras luchas. Si recordamos que Jesús conquistó y venció todo decreto que nos condenaba y nos llevó a libertad y vida eterna, podemos apropiarnos de la paz de Cristo en los tiempos más difíciles.

Por esto amigo y amiga que estás leyendo estas palabras, recuerda que, sea presión, opresión, tensión, angustia, tribulación, adversidad, aflicción, pena, imagínese que todo esto en las manos de Jesús es comprimido y desechado. Jesucristo es la verdadera fuente de la paz. Él dijo y sigue diciendo para ti, para mí y para todo aquel que crea en Él estas palabras tranquilizadoras: “Estas cosas os he hablado para que en mí tengáis paz”. 

Él no afirmó que gozaríamos de quietud en el mundo, ni prometió que viviríamos en esta vida libre de toda tribulación, más bien dijo que nos consoláramos con la idea de que él ha librado la batalla y obtenido la victoria en nuestro lugar. Recuerda Jesús dijo “Confiad, yo he vencido al mundo”. Shalom.