Gálatas 4:4-5 “Pero cuando vino el cumplimiento del tiempo, Dios envió a su Hijo, nacido de mujer y nacido bajo la ley, 5 para que redimiese a los que estaban bajo la ley, a fin de que recibiésemos la adopción de hijos”.

Por: Ps. David Agustín Pérez Vera

No es ajeno para nosotros conocer sobre la existencia de muchas leyes que regulan la vida, el desarrollo, el crecimiento e incluso la convivencia en la sociedad. Sin embargo, hay una ley de la cual la Palabra de Dios, manifiesta que tenía bajo la esclavitud a su pueblo. En tal virtud, el nacimiento de Cristo Jesús, fue la señal más evidente del cumplimiento del tiempo que alude al momento señalado por Dios para la venida de su Hijo Jesús, cuando las condiciones mundiales favorecían el impacto del evento más relevante de la historia de sus principios, para que se cumpla la Palabra de Dios. 

Por todo esto, para pensar en la navidad, es necesario conocer que ese nacimiento, tenía el más noble de los propósitos, es decir, Dios envió a Cristo Jesús para rescatarnos de la esclavitud, redimiéndonos, y así convirtiéndonos en sus hijos por adopción. Por eso, este tiempo es para recordar y compartir buenas nuevas, en donde la intervención de Dios trajo esperanza y libertad para la humanidad. 

No podemos olvidar que toda la humanidad está bajo la maldición del pecado según Romanos 3:23, por tal razón, era necesario que Jesús viniera a este mundo como el Salvador. Preguntémonos hoy ¿hemos hecho a Jesús el Salvador de nuestra vida? Tu tiempo es hoy. Esta navidad tienes la oportunidad de que Jesús te saque de la esclavitud y la maldición, y te lleve a la bendición, libertad y vida eterna. Shalom.