Filipenses 1:9 “Y esto pido en oración, que vuestro amor abunde aún más y más en ciencia y en todo conocimiento”.
Por: Nelly Jácome de Pérez
Esta es una de las oraciones más bellas y poderosas que Pablo oró por la iglesia del siglo I. Es una oración importante para nosotros hoy en día. Para que aprendamos a conocer a Dios íntimamente, para que nuestros corazones estén llenos de luz y para que entendamos el brillante futuro que Dios nos promete.
Así como Pablo sabía que esta revelación no sucedería aparte del Espíritu Santo, nosotros no podemos percibir estas cosas con solo nuestro propio intelecto, porque estas son verdades espirituales, y no verdades intelectuales.
Esta es una oración que debemos orarla con frecuencia, “no solo por nosotros mismos, sino también por aquellos que amamos, y que es nuestro deseo que anden con el Señor. A lo que oramos la Palabra de Dios, allanamos el camino para que Su voluntad y propósito se cumplan en nuestras vidas. Pablo oró para que los Efesios conocieran mejor a Dios.
¿Cómo puede conocer a alguien? ¿Leyendo su información biográfica o histórica? Hacer eso servirá “para conocer acerca de esa persona”, pero no para conocerla realmente. Si quiere conocer a una persona, debe pasar tiempo con ella. ¡No hay otra forma de lograrlo!. Los efesios necesitaban saber mucho más. Es por eso que Pablo oró por ellos. Pablo enfatiza las riquezas de lo que tenemos en Cristo. ¡Y quiénes somos en Él! ¿Podemos comprender realmente cuán ricos somos?.
Cuando el corazón comienza a arder con la verdad de Jesús, la verdad de la Palabra de Dios se vuelve tan vívida y real que su corazón es cautivado por ella y comienza a arder, cuando echa raíz en usted y simplemente debe de responder a ella, es entonces cuando sabe con certidumbre que Dios es real, que la esperanza de su llamamiento es genuina, que el poder de Su presencia está disponible, y que las riquezas de Su ministerio por medio de usted son manifestadas a otros así mismo, Maranatha ¡Cristo viene pronto!.