Salmos 105:1 “Den gracias al Señor, invoquen su nombre; den a conocer sus obras entre las naciones”. 

Escrito Por: Welinton Flores Flores 

En ocasión vemos como una misión que va dirigida únicamente a los líderes de la congregación, pero es un mandato para todos los que lo conocemos. Debemos mostrar que somos sus discípulos y dar a conocer a Dios a todo el mundo. Juan 15:8 dice: “En esto es glorificado mi Padre, en que llevéis mucho fruto, y seáis así mis discípulos”.

Veamos esto (por un momento) como un proyecto, para que podamos comprender con más facilidad y apropiarnos de este proyecto del reino de nuestro Dios. Qué es un proyecto? El término proyecto hace referencia a la planificación o concreción de un conjunto de acciones que se van a llevar a cabo y un conjunto de recursos que se van a usar para conseguir un fin determinado, unos objetivos concretos.

Jesús tiene un plan al cual Él nos suma, para que hagamos un conjunto de acciones unidos en un mismo espíritu, para ir cumpliendo objetivos y así llegar a nuestro fin.

Mateo 28:19-20

Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo; enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado; y he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo, Amén.

Hay 2 puntos fundamentales en este versículo:

Ir y hacen discípulos: Tienes una acción y un propósito.

La acción es ir, el propósito hacer discípulos.  Esto nos deja ver claramente que no podemos estar sin movernos para cumplir este objetivo.

No dice cuando les toque ir hagan discípulos, es más conciso y dice muévanse vayan y hagan.

Tenemos un mensaje claro, en el texto de hoy, primero dar gracias a Dios y eso refiere a ser agradecido. Cuando sabemos el valor que tiene, lo que Jesucristo hizo por nosotros y el valor que tiene para El que nosotros cumplamos su mandato. Entonces podremos ser agradecidos por aquello. Cuidemos de ser mal agradecidos por que estaríamos menospreciando la muerte de Jesús, y estaríamos pisoteando su sangre (Hebreos 10:28-29 “  El que viola la ley de Moisés, por el testimonio de dos o de tres testigos muere irremisiblemente.  ¿Cuánto mayor castigo pensáis que merecerá el que pisoteare al Hijo de Dios, y tuviere por inmunda la sangre del pacto en la cual fue santificado, e hiciere afrenta al Espíritu de gracia?”.  Un versículo duro, que nos tendría que hacer temblar si estamos desvalorizando el gran sacrifico que Jesucristo hizo por ti y por mí.

Señor Jesús, te pedimos que nos ayudes a ser gratos con tu gran amor y cumplir tu mandato para el cual nos llamaste, queremos ser siervos fieles en este mundo lleno de maldad, ayúdanos a poder ser sal y luz, en tu nombre lo pedimos amén.