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Lucas 6:38 “Dad, y se os dará; medida buena, apretada, remecida y rebosando darán en vuestro regazo; porque con la misma medida con que medís, os volverán a medir.”

Escrito Por: Ericka Herrera de Avendaño.

Jesús nos enseña un principio poderoso sobre el dar y recibir. Él nos anima a dar de manera generosa y desinteresada, garantizando que aquellos que dan recibirán de vuelta en abundancia.

Dios es un dador generoso y Él nos invita a imitar Su naturaleza en nuestras vidas. Cuando damos con una medida buena, apretada, remecida y rebosante, estamos alineándonos con el corazón de Dios y participando en Su obra de provisión y bendición.

Sin embargo, esta promesa de recibir no se trata de una mentalidad egoísta o de dar solo para obtener beneficios personales. Es sobre confiar en que Dios proveerá para nuestras necesidades y reconocer que Él es el dueño de todas las cosas. Dios no solo nos bendice materialmente, sino que también derrama Su amor, gracia y misericordia sobre nosotros. Cuando damos con generosidad, abrimos el camino para que Dios nos bendiga de maneras inimaginables.

Es importante recordar que la medida con la que damos es la medida con la que seremos medidos. Si somos tacaños y egoístas en nuestro dar, también recibiremos escasez y estrechez. Pero si damos con generosidad y desprendimiento, Dios nos añadirá abundantemente.

Hoy, reflexionemos sobre nuestra actitud hacia el dar. ¿Estamos dispuestos a dar de manera generosa y desinteresada? ¿Reconocemos que todo lo que tenemos proviene de Dios y que Él nos llama a ser administradores fieles de sus bendiciones?.

Oremos para que el Espíritu Santo nos guíe en nuestro acto de dar. Oremos para que podamos liberarnos de la avaricia y la preocupación por nuestras posesiones, y en su lugar, dar con gozo y confianza en la provisión de Dios. Oremos para que nuestro acto de dar sea un reflejo del amor y la generosidad de Dios en nosotros. Que nuestra medida de dar sea abundante y rebosante. Que seamos canales de bendición en la vida de otros, y que Dios nos recompense según Su gracia y generosidad, en el nombre de Jesús, amén.

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